Tras empatar 0-0 en un apretado encuentro, La Roja derrotó a Argentina en la definición a penales y conquistó por primera vez el torneo continental.
La escuadra nacional, dirigida por Jorge Sampaoli, llegó a su tercera final continental en calidad de invicto tras una sólida campaña. Dos triunfos y un empate en fase de grupos, y victorias ante Uruguay y Perú en cuartos de final y semifinales, llevaron a La Roja al partido decisivo, donde enfrentó a Argentina.
La albiceleste también estaba invicta, y había derrotado en penales a Colombia en cuartos de final, y goleado a Paraguay en semifinales. Además, el conjunto de Gerardo Martino contaba entre sus filas con quien sería galardonado con el Balón de Oro ese año: Lionel Messi.
Para este duelo, Sampaoli realizó dos modificaciones en el equipo, ambas en la defensa: Francisco Silva por José Rojas, y Jean Beausejour por Miiko Albornoz.
De esta forma, Chile salió a la cancha del Estadio Nacional con Claudio Bravo en el arco; Mauricio Isla, Gary Medel, Silva y Beausejour en la zaga; Charles Aránguiz, Marcelo Díaz y Arturo Vidal en el mediocampo, dejando a Jorge Valdivia en la creación; y Alexis Sánchez y Eduardo Vargas como extremos en ofensiva.
Con alrededor de 45 mil espectadores en las tribunas, La Roja salió en busca de su primer título, acercándose al arco de Sergio Romero en los instantes iniciales. Con el pasar de los minutos, la albiceleste equiparó las acciones y Claudio Bravo tomó protagonismo con al menos dos buenas atajadas.
El marcador no cambió, y en el segundo lapso el trámite se mantuvo, con algunas llegadas de peligro para ambas escuadras. A los 81 minutos, una media vuelta de Alexis a metros del arco emocionó a los asistentes, pero el balón se fue levemente desviado. En contraparte, ya en la última jugada del partido, Gonzalo Higuaín estuvo cerca de anotar el 1-0, pero erró por poco.
Sin goles, los equipos se encaminaron a la prórroga, donde Chile estuvo nuevamente cerca de marcar. Al final del primer tiempo extra, Sánchez aprovechó un error de Javier Mascherano para encarar al arco y rematar con fuerza, pero el balón se fue apenas alto. Los minutos pasaron y el marcador se mantuvo en 0, por lo que el árbitro Wilmar Roldán decretó el final del encuentro y dio paso a la tanda de penales.
Matías Fernández, quien ingresó en el segundo tiempo, abrió la cuenta con un fuerte remate a la esquina. Messi y Vidal anotaron los tiros siguientes, pero Higuaín envió su disparo por sobre el travesaño. Aránguiz puso a Chile 3-1, y luego Bravo contuvo el lanzamiento raso de Ever Banega.
De esta manera, Alexis sólo tenía que marcar para darle el primer título continental a La Roja. Y así lo hizo, con un tiro preciso que decretó el campeonato en suelo nacional para los chilenos.
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