La Roja cayó ante los germanos por 1-0 en un vibrante encuentro disputado en San Petersburgo.
Después de dejar atrás una árdua llave de semifinal frente a Portugal, vía lanzamientos penales, Chile se plantó en la final de la Copa Confederaciones 2017 en Rusia. La disputa por el título en San Petersburgo sería ante un rival conocido: Alemania.
Algunos días antes, por la segunda fecha de la fase de grupos, ambas escuadras se enfrentaron en Kazán. En aquel partido, con goles de Alexis Sánchez y Lars Stindl se selló una igualdad 1-1. Ese antecedente pronosticaba un equilibrado duelo definitorio.
Chile, dirigido por Juan Antonio Pizzi, salió al campo con los mismos nombres del compromiso ante Portugal: Claudio Bravo en portería; Mauricio Isla, Gary Medel, Gonzalo Jara y Jean Beausejour en defensa; Arturo Vidal, Marcelo Díaz, Pablo Hernández y Charles Aránguiz en el medio; Alexis Sánchez y Eduardo Vargas en delantera.
Los primeros minutos beneficiaron a La Roja, que encontraba el camino para llegar al arco de Ter-Stegen vía lanzamientos de media distancia con Vidal y Vargas como ejecutantes. Cuando parecía que Chile inauguraría el marcador, Alemania anotó el 1-0 vía Lars Stindl.
El marcador en contra no mermó a los nacionales, quienes no escatimaron en recursos para llegar al pórtico germano. En la segunda etapa, Chile aumentó su carga ofensiva con el ingreso de Leonardo Valencia.
Por su parte, Alemania se acercó al arco de Bravo, aprovechando los espacios que dejó la zaga chilena al buscar el descuento. Julian Draxler y Timo Werner fueron pieza clave en el contragolpe europeo, pero no lograron estirar las cifras.
En los minutos finales, Chile tuvo varias opciones, pero no pudo vulnerar el arco defendido por Ter-Stegen. Así, el juez pitó el final del compromiso y los alemanes se coronaron campeones.
De este modo, Chile se adjudicó el subcampeonato en su primera incursión en este torneo y terminó con un registro de 2 victorias, 2 empate y 1 derrota.
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